Fue así como numerosos carniceros de origen europeo, especialmente alemanes y austriacos, comenzaron a producir salchichas. Uno de ellos, el alemán Charles Feltman decidió comenzar a vender perritos calientes por las playas de Coney Island en 1867 y los resultados sobrepasaron lo imaginado ya que su plato especial se transformó en el furor del verano norteamericano. Sin embargo, la competencia no tardó en aparecer y fue así como un empleado del propio Feltman, un polaco llamado Nathan Handwerker, decidió dejar su trabajo y comenzar a vender sus propios perritos calientes a mitad de precio al otro lado de la calle. Claro está, el éxito no tardó en llegar, y al poco tiempo Nathan abrió un local que luego se transformó en una cadena de locales llamada ‘Nathan’s Famous’, que aún existe.
Otra versión cuenta que en los años ochenta del siglo XIX, un bávaro llamado Antoine Feuchtagner desembarcó en EEUU y se instaló en Saint Louis, Missouri, donde se dedicó a comercializar salchichas. En 1904, Antoine tuvo la idea de ofrecer a sus clientes unos guantes blancos de algodón para que pudieran degustar sus salchichas sin quemarse pero, a pesar de la curiosidad de la clientela, la operación no resultó porque los guantes eran caros y no se podían reutilizar. Antoine planteó el problema a su cuñado, un creativo panadero, al que enseguida se le ocurrió fabricar unos panecillos alargados especialmente adaptados para introducir la salchicha.
Charles Feltman pidió a sus vendedores que pregonaran:
"Red hot! Get your red-hot dachshund sausage!", es decir, "¡Al rojo vivo! ¡Compren su salchicha dachshund al rojo vivo!".
Hot dog fueron las dos primeras palabras pronunciadas por Mickey Mouse en un corto animado.
A partir de 1945, después de la Segunda Guerra Mundial, cuando el mundo empezó a sufrir gran influencia de la cultura estadounidense, el “perro caliente” conquistó definitivamente el mundo.
Los 'hot dogs' son uno de los alimentos más peligrosos para los niños. Su forma alargada, tamaño y textura facilitan que los peques se atraganten con facilidad.
De acuerdo con el informe que publica el periódico británico ' Times ', los perritos calientes provocan el 17% de las asfixias alimentarias infantiles en EE.UU.
El estadounidense Joey Chestnut ganó el título del mayor comedor de 'hot dogs' por cuarta vez consecutiva; fue capaz de engullir 54 en 10 minutos en el concurso celebrado en Nueva York.
La primera edición del torneo se llevó a cabo en 1916 cuando, según la leyenda, cuatro inmigrantes quisieron decidir cuál de ellos era el más estadounidense. Desde ese día, la competencia se lleva a cabo cada año el día de la fiesta de la independencia, el 4 de julio, en Coney Island, al sur de Brooklyn.
El perrito caliente más largo del mundo posee una longitud de 60 m y fue manufacturado por la empresa japonesa Shizuoka Meat Producers de Shizuoka.
El término "hot dog" se debe al periodista deportivo Thomas Aloysius Dorgan (Ted Dorgan), que escribía y hacía tiras de dibujos en el "New York Evening Journal". Ted asistía a un partido de béisbol en el estadio de Polo Grounds en 1901 de los New Yok Gigants, cuando oyó como Harry Stevens vendía las salchichas diciendo: "They're red hot! Get your dachshund sausages while they're red hot!" («Aquí están las rojas calentitas, adquiera un dachshund (perro salchicha) mientras estén calientes»). Finalmente esta analogía inspiró a Ted Dorgan a representarlo así en sus tiras cómicas: un "dachshund" en un pan", lo que dio la idea de "hot dog" (perro caliente).
Las primeras aproximaciones a la hamburguesa que conocemos se produjeron en Hamburgo, Alemania, en el siglo XIV cuando los comensales preparaban tiras de carne de muy baja calidad combinada con algunos condimentos. Así nació el filete hamburgués. La receta original llegó a Alemania proveniente de las tribus mongoles y turcas que picaban la carne de ganado asiático para poder comerla con mayor facilidad.
Posteriormente fueron los inmigrantes alemanes de finales del siglo XIX quienes introdujeron en los EEUU el plato llamado «filete americano al estilo Hamburgo» (en Alemania existe todavía en Hamburgo lo que se denomina Frikadelle). Un alimento muy similar es el Rundstück warm.
El documento más antiguo que hace referencia a este plato es una carta del Restaurant Delmonico´s que en 1834 ya la ofrecía a su clientela.
En 1895, un chef llamado Louis Lassen de Connecticut, Estados Unidos elabora la primera hamburguesa en Norteamérica; la receta se la dieron unos marineros provenientes del puerto de Hamburgo.
Hoy en día su origen es discutido, ya que diferentes comarcas de los Estados Unidos reclaman ser los inventores de la hamburguesa moderna. Una de las historias proviene de la ciudad de Seymour, Wisconsin, donde en 1885 Charlie Nagreen trabajando en su puesto de comida de la Feria Estatal se le ocurre resolver un problema: sus clientes querían pasear por la feria mientras comían, y necesitaban una forma práctica para hacerlo. Charlie coloca la carne entre dos rebanadas de pan, denominándola hamburguesa. El éxito fue tal, que pronto aparecen más inventores, como Frank Menches en 1892 durante la Feria del Condado Akron, Ohio. Lo único cierto es que en la Feria Mundial de San Louis de 1904, la hamburguesa ya era muy famosa.
Más curiosidades sobre las hamburguesas...
La primera cadena de hamburgueserías del mundo se denominaba White Castle y fue fundada en Wichita (Kansas) en 1921 por el cocinero Walter A. Anderson y el corredor de seguros E. W. Ingram. Ofrecían como novedad el Pig Stand, es decir, servían las hamburguesas sin la necesidad de abandonar el vehículo (Drive-In). Algo similar hicieron en California los hermanos Dick y Ronald McDonald en el año 1948.
La difusión de la hamburguesa comenzó en el siglo XIX cuando el doctor J.H. Salisbury, afamado nutricionista, la recomendó como un alimento de fácil digestión.
A principios del siglo XX, en la tumba de un alto dignatario con 4 mil años de antigüedad, unos arqueólogos encontraron un pan relleno con un pastel de carne horneado.
En EE. UU cada estadounidense come de media 3 hamburguesas a la semana.
El empleo gastronómico de la hamburguesa está tan extendido por todo el mundo que se emplea como un indicador de la economía de los países en el llamado «Índice Big Mac», que es una tabla de 120 países en la que se expone cuánto vale (en dólares) una hamburguesa en distintos lugares del mundo. De esta forma permite comparar el nivel de competitividad de la economía de cada país.
A la cárcel por servir una hamburguesa muy salada: Los riesgos de una dieta muy rica en sal quedaron claros para Kendra Bull, una joven empleada de un McDonalds que acabó durmiendo en el calabozo después de haber servido a un policía una hamburguesa demasiado salada.
La hamburguesa más grande del mundo pesa 95,5 kg., según sus creadores, Joe e Iman El-Ajouz, propietarios del restaurante Ambrosia On The Spot de Sídney. El gigantesco bistec incluyó 81 kilos de carne, 120 huevos, 150 lonchas de queso, 16 tomates, 2 kilos de lechuga, 1,5 kilos de remolacha, 2 kilos de salsa especial y 21 kilos de pan con semillas de sésamo.
8 comentarios:
Muy interesante como siempre, Raquel. La de años que estuve creyendo que el donut era español, fíjate, hasta que vi que aparecían en las películas americanas...
Muchos besos
Recuerdo la primera vez que probé un perrito caliente, en Casa Peter en La Laguna, y no me gustó nada. Con el tiempo supe que lo que no me gustaba era la unión de la mostaza y el tomate. Ahora me gusta más la hamburguesa. Abrazos
Muy bueno el post y curioso, sobretodo después de comer una buena hamburguesa casera.
Impresionante la foto de los 95kg de hamburguesa -¿cómo lo haces para buscar estas cosas?-
Un abrazzo!!
Muy curioso todo, el mundo de las comidas esta lleno de anecdotas a cual mejor; adoro toda la comida, variando en los mas posible pero donde este un buen bocata de calamares o de jamon con tomate...un fuerte abarzo.
Se podía intuir el origen del perrito caliente, es que las mejores salchichas son las alemanas. Tengo el recuerdo de comerme un perrito en la estación de Frankfurt, como ser Heidi cuando iba a ver a Clara xd.
Ay, ver esas fotos de las hamburguesas después de desayunar me ha dejado un poco revuelta xD. De vez en cuando no está mal comer ese tipo de comidas, aunque si son hamburguesas caseras, por ejemplo, mejor. Y donde estén unas garbanzas, queso de Arico, carne fiesta etcc que se quite lo demás jajaja.
Un beso grande!!
¿Por qué será que de vez en cuando nos apetece comernos estas porquerias?
El perrito caliente me encanta, la hamburguesa siempre apetece, no esa de los 95 kg, ¡que indigestión!, pero no puedo ni he podido nunca con los donuts, ¡uach!, esa grasa, ese empalague...
Made in america con base europea, curioso, ¿no? Bueno podría decirse que los americanos mejoraron una receta ya existente.
Un besote
:D
Pues que quieres que te diga...me entró hambre!!!...jajajaa
Muy buena esta entrada, no conocía mucho al respecto, sólo había oído la del donut...
Bss
Nunca he podido con los donuts, no me gustan nada, me empalagan y además creo que no son nada saludables; demasiadas grasas. Es verdad que salen mucho en las pelis americanas. En las pelis de polis siempre hay alguien que se queda a medias con el suyo, es matemático.
Muchos besos, Durrell :)
Casa Peter, es mítico ese bar; según mi padre fueron los primeros en hacer perritos calientes aqui, en la isla, la verdad es que son buenisimos, las hamburguesas también pero yo prefiero los perritos.
Un abrazo.
Gracias Angel, pues gracias a google; si te gustan estas cosas curiosas no es dificil encontrarlas.
Un abrazo :)
Pues sí, es increible porque todo tiene su historia, hasta esas cosas que nunca jamas nos planteariamos porque las damos por ciertas, como por ejemplo ¿siempre fueron naranjas las zanahorias? Yo no lo sabía pero por lo visto en esto del color naranja tuvieron mucho que ver los holandeses.
A mi también me gusta comer variado y también apuesto por el producto español; donde esté una tortilla de papas que se quite todo lo demás.
Abrazos :)
Es verdad, por lo de las salchichas se podía intuir de donde venía la receta del perrito caliente; qué bueno, Virginia, en la estación de Frankfurt?, seguro que estaba riquisimo.
La verdad que la foto de la hamburguesa gigante no es muy apetitosa.
Arriba el queso de Arico, y los productos de las islas :))
Besos.
Creo que la culpa la tiene la globalización y todo eso; nos hemos apropiado de comidas y costumbres de los americanos, y casi sentimos la misma necesidad que ellos de comer perritos, hamburguesas, pizzas, palomitas de maíz y demás, que no se caracterizan precisamente por ser comidas sanas.
Besos :)
Gracias Bohemia. Ya sabes, con moderación; una al año no hace daño :)
Besos.
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