Antiguamente
era habitual el uso en el arte de sangre y fluidos corporales para obtener determinados
pigmentos. El mummy brown se hizo popular durante el Renacimiento, este “marrón
de momia” (de color café oscuro y profundo) resultaba de la mezcla de harina de
hueso y betún de embalsamar, que se obtenía de la pulverización de momias
egipcias (tanto humanas como de gatos), que se traficaban de manera
clandestina. Este color resultaba útil para efectos de esmalte, sombreados y tonos
carne.
Durante
este período el “polvo de momia” llegó a ser, junto a la triaca, la piedra
bezoar y el cuerno del unicornio, uno de los cuatro medicamentos más valiosos y
solicitados. Se usaban en pomadas,
jarabes, pociones, ungüentos e infusiones de efecto medicinal para curar enfermedades
de todo tipo. La demanda llegó a ser tan grande que fueron escaseando las
momias y empezaron a emplearse momias europeas. El producto se utilizó por
varios siglos y fue uno de los favoritos de los pintores a finales del s. XIX.
Cuenta
la leyenda que Martin Drölling para crear “Interior de una cocina”, usó
corazones embalsamados de la realeza, concretamente de los corazones
embalsamados de Luis XII y Luis XI para
mezclar la sustancia segregada con los óleos.
Afortunadamente
en 1964 el director de la compañía C.
Robertson, Geoffrey Roberson-Park, dedicada a la producción de colores, anunció
que dejarían de producir dicho color: “Tal vez por allí nos queden algunos
miembros momificados, pero no son suficientes para hacer pintura. Vendimos la
última momia completa hace algunos años por unas tres libres esterlinas. No
creo que consigamos más”. Esta sorprendente declaración deja claro la
devaluación en que habían caído las momias y, por otro lado, su escasez,
derivada en gran medida de las decididas políticas del gobierno egipcio para la
protección de su patrimonio arqueológico, que durante siglos había sido objeto
de grandes saqueos.
Expolio de momias egipcias, lucrativo e inmoral negocio. |
Fuentes:
Inpralatina.com
Es muy fuerte esta información y muy curiosa e interesante.
ResponderEliminarDe piedra me he quedado al leer tus letras.
Sentarse contigo en tu desván mientras nos susurras secretos como este al oído no es un honor sino un lujo.
Te quiero muchísimo Raque.
Muchas gracias amiga Carol, siempre me das muchos ánimos y eso me gusta mucho. Para mi es un honor sentarme a tu lado en este desván secreto y compartir contigo estas cosas curiosas. Yo tampoco sabía esto y mi reacción fue igual a la tuya...
EliminarTe quiero igualmente.
Muchos besos :)
Inmoral un rato largo el negocio, suena incluso surrealista pero como suele pasar la realidad supera a la ciencia ficción. Muy interesante Raque.
ResponderEliminarBesos 😊✌️
La mayoría de las veces sí, la imaginación se queda corta frente a la realidad.
EliminarMuchos besos :)
Uf Raquel, mira que se han hecho cosas increíbles ¿Como se les habrá ocurrido? Está en el Louvre, no cualquiera lo tendría como colección privada, creo... O sí, vete a saber.
ResponderEliminarNo sé si viste lo que te puse, pero estos días me he estado poniendo al día con todo lo que has escrito el tiempo que no estuve. Y ya sabes, para mí excelente.
Abrazos
Creo que en el arte estas historias siempre dan otro estatus a la obra en cuestión, ya sólo por lo surrealista que parece hay a quien le encantaría colgar ese cuadro en su casa.
EliminarSi Miguel, te leí en Dónde se posa el sol. No hay mucho que leer, este año he publicado poco, y el pasado menos aún. Los blogueros somos una raza que se extingue poco a poco.
Me alegro mucho de tu regreso, se te echaba en falta.
Abrazos
Como dice Ana, a veces la realidad supera a la ficción. Una información muy interesante que desconocía totalmente. Abrazos
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