28 de agosto de 2018

10 curiosidades sobre animales que quizás no conocías


#1 El basilisco común es un lagarto nativo de América Central, y tiene la notable habilidad de ser capaz de caminar sobre la superficie del agua, es por ello que se le ha apodado cariñosamente como “Jesucristo”.

#2 Los escarabajos peloteros utilizan las estrellas para orientarse. Es el único animal conocido que se guía por la Vía Láctea.

#3 Los gorilas se ríen cuando le hacen cosquillas y también lloran si sienten algún daño físico o psicológico, pero a través de sonidos, no de lágrimas.

#4 El pájaro carpintero tiene una lengua extremadamente larga que le permite extraer insectos de los huecos que practican en los troncos de árboles. Pero el largo no es lo más asombroso de su lengua, sino el hecho de que da toda una vuelta al cráneo, comenzando por los orificios nasales (sobre el pico), pasando sobre los ojos, rodeando el cerebro y bajando hasta la boca, por donde sale.

#5 El pez duende es una de las criaturas más raras escondidas en el fondo del océano. Nombrada según sus ojos en forma de barril, el rasgo único de esta criatura es que su cabeza es completamente transparente.




#6 El águila arpía, nativa de América central y del sur, es el águila más grande del mundo, capaz de capturar animales de hasta 6 kilos  con sus enormes garras, que son similares a las de un oso pardo.

#7 El pangolín chino es el mamífero que ostenta un triste récord, es el animal con el que más se trafica pues en Asía, de donde es originario, se cree que sus escamas son curativas y su carne da poder a quien lo come. En la última década un millón de ejemplares se han sacrificado, lo que le ha llevado a encabezar la lista de animales en peligro de extinción.

#8 Antiguamente las ballenas belugas eran confundidas con sirenas.

#9 Los capullos de la mariposa de la especie Mechanitis polymnia, conocida como mariposa de alas atigradas por los dibujos que presentan sus alas en estado adulto, parecen de oro; el curioso aspecto de las crisálidas las ha hecho famosas.

#10 El pez de manos rojas, el pez más raro del mundo,  tiene unos apéndices extraños que parecen manos; estos animales no se comportan como otros peces pues en lugar de nadar utilizan sus “manos” para moverse por el fondo del océano.




24 de agosto de 2018

¿Quién inventó las gafas de sol?




La antigüedad apunta a Nerón. Al menos parece que Plinio y Renan, en su “Historia Natural”, mencionan esta anécdota: “El emperador Nerón miraba las peleas de los gladiadores en una esmeralda (smaragdus)”.  ¿Podría ser este el antecedente, algo lejano, de las gafas de sol? Bueno, la verdad es que esto parece deberse más a la hipermetropía que sufría Nerón, ya que la piedra le permitía ver más nítidamente y su cometido no parecía estar relacionado con protegerse del sol.
Las primeras gafas no tenían cristales.  Las únicas  que se conservan están en un museo de Canadá. Su función era proteger la vista aunque impedía la visión de los esquimales en  sus viajes al ártico, por lo que no eran muy practicas.
La “Máscara de Ivoire”, que así es como se las conoce, fue encontrada en el norte de Canadá, en la provincia de Nunavut. Realizada en hueso, ésta se adaptaba a la zona ocular mediante una cincha o sujetándola con el ropaje.



Sin embargo, hay que trasladarse a  la lejana China para encontrar el origen de las gafas como las conocemos hoy en día. Por lo visto, en el siglo XIII, en los juicios era habitual que  los jueces chinos se colocaran unos cristales ahumados que impedía a los contendientes del pleito conocer la expresión del juez, reforzando así su imparcialidad durante todo el litigio. El mismo Marco Polo reflejó en alguno de sus escritos hacia 1275 el uso de estos artefactos mientras exploraba el país.
En el siglo XV  en Italia  se usaron cristales verdes para mejorar la visión de impedidos. El cristal verde mejoraba el contraste de los objetos, lo que incrementaba la agudeza visual de los que usaban estas gafas. En Venecia, Goldoni lucía una especie similar a unas gafas de sol que utilizaba para mejorar la visión y reducir el impacto de los reflejos del sol en las aguas de los canales.



En el  siglo XVIII el óptico James Ayscough realizó un experimento; probó a tintar las lentes: la inclusión de colores en los cristales haría mejorar la visión, la agudeza de visión en las personas que la llevaban, así como la protección ante elementos de alta luminosidad. El azul y verde mejoraban la percepción por parte del ojo humano de los objetos. Sin embargo, Ayscough nunca consiguió la protección ante el sol ya que nunca estuvo en sus planes.
A mediados del siglo XIX, Walter Alden en 1866 escribió sobre largas columnas de soldados que marchando llevaban “verres de cocquille”, una especie de gafas de concha que los soldados usaban para resguardarse del sol.
El 24 Junio 1891 en The Chicago Herald aparecía una noticia sobre el fallo garrafal de un jugador, Reilly, en un partido de béisbol tras haber perdido sus “dark glasses” gafas de sol, antes de la recepción de una bola alta.
El 13 de Junio 1895 en The Sioux City Journal apareció un anuncio de una tienda llamada Parsons-Pelletier que ofrecía stocks de una óptica que había caído en bancarrota. En el anuncio se leía, spetacles, eyeglasses, sunglasses y pocket mirrors al fascinante precio de 10 centavos mientras que en la óptica se vendían a 50 y 75 centavos.



En 1929 Sam Foster fundó Foster Grant Company, y comenzó a vender gafas de sol en la orilla del océano en Atlantic City, New Jersey.
Desde el primer instante el invento fue aprovechado por la industria del cine de aquella época, pues era una forma de descansar la vista de los interminables rodajes y los potentes focos.  Marylin Monroe, Grace Kelly, Gloria Swanson, Elizabeth Taylor las lucieron en portadas y entrevistas, convirtiéndolas en objeto de deseo para los que seguían los dictados de estilo de Hollywood.



Las gafas polarizadas fueron un inventó de la compañía Ray Ban. Su fundador fue Edwin H. Land (Responsable de Polaroid), y desde entonces el estilo “aviator” ha sido el icono de su marca. Otra de las marcas usadas en la meca del cine ha sido Persol, el modelo 649 llevadas como nadie por Steve McQueen, pero ninguna ha podido desbancar a “Ray Ban”, desde su modelo Wayfarer hasta las Clubmaster pasando por las Balorama.