Sinopsis:
Antes de ser Wonder Woman, era Diana, princesa de las Amazonas, entrenada para
ser una guerrera invencible. Habiendo crecido en una apartada isla paradisíaca,
cuando un piloto americano se estrella en sus orillas y le advierte de un
conflicto masivo que sacude el mundo exterior, Diana abandona su hogar, convencida
de que puede detener la amenaza. Luchando junto a los hombres en una guerra
para acabar con todas las guerras, Diana descubrirá el alcance de su poder… y
su verdadero destino.
Tengo que confesar que me siento más próxima a las películas de superhéroes que se hacían en los 80 que a las que se producen ahora. Nací en esa década en la que las películas juveniles nos hacían evadirnos de la realidad. Aquel era un cine repleto de personajes con lo que conectabas al instante, con los que sufrías, reías y vivías mil aventuras sintiéndolo en primera persona. Por eso me cuesta un poco ver este cine de superhéroes en donde lo más importante es cuánta destrucción haya (cuanta más mejor) en lugar de crear un guión interesante y unos personajes carismáticos con un mínimo de líneas de guión. Sonado fue el caso del último Superman, Henry Cavill, que en la última película de DC Entertainment “Batman Vs Superman” ostenta un récord a la parquedad, apenas pronuncia 43 frases a lo largo de dos horas y media de película.
Lo cierto es que no se puede decir que las últimas
películas de la productora DC fueran fracasos, pues en taquilla han rendido
mejor que bien. Otro cantar es cómo han sido
valoradas. Los críticos se han cebado con ellas y razón no les falta, pues
atesoran todos los defectos mencionados: guiones inexistentes, personajes mal
dibujados, y un exceso de ruido y uso gratuito de efectos especiales para
enmascarar sus flojas tramas.
Por ello DC ha apostado por Wonder Woman para subsanar
estos fallos. ¿Lo ha conseguido? La respuesta es que DC va mejorando favorablemente
pues “Wonder Woman” logra algo que no habíamos podido hacer con los últimos
personajes de su cantera de superhéroes, que empaticemos con los protagonistas.
No lo tenía fácil, pues ya incluso antes de su estreno
la película parecía tenerlo todo en contra. Algunas voces machistas habían
puesto en duda la capacidad de la
superheroína para atraer a las masas alegando un supuesto tono feminista de la
película.
Aún así la directora Patty Jenkins ha salido airosa del reto. Y aunque no es una película realmente
memorable sí que es claramente más entretenida que las últimas y fallidas
propuestas de la productora.
¿Qué falla? Pues hay algo muy notorio que le resta
puntos; los mencionados efectos especiales que se notan bastante flojos y no
están a la altura de una historia de superhéroes. Otro punto bastante en
contra, y que suele descuidarse en muchas películas del género, son los
antagonistas, los malos de la función. Sinceramente todos lucen caricaturizados
al extremo, con todos sus clichés y tópicos posibles, que incluyen deformidades
físicas, estética nazi, looks extravagantes, risitas malévolas…; sólo les faltó
la sempiterna mascota en el regazo para completar el cuadro. A parte y aunque
los personajes principales están bien definidos los secundarios están algo
descuidados.
¿Sus aciertos? Wonder Woman. Gal Gadot. Porque ella es
todo lo que esperamos de una heroína. Es fuerte pero tierna, es ingenua pero
con grandes convicciones, confía más en la humanidad de lo que la humanidad lo
hace consigo misma, es aguerrida, una amazona, es femenina pero decidida. Es
aquel Clark Kent de 1978 que llegaba a Metrópolis rebosante de energía escondiendo
su identidad tras unas gafas. Hay muchas características de ambos que comparten,
pero no parece ser casualidad pues Patty Jenkins ha admitido que se inspiró en
aquella película para su Wonder Woman, y se nota, pues hay más de un guiño a ella.
Si hablamos de los puntos buenos hay que mencionar la
química entre los dos personajes protagonistas, Diana y Steve Trevor; su
historia de amor es creíble y fluida. El ritmo de la película es bueno, aunque
hay que decir que hacia el tercer acto se estanca. Y es que la película tiene
un desarrollo bastante clásico por ello tiende a ser previsible, y como tiene una clasificación
para todos los públicos también es bastante “light”. Aunque el escenario de la
historia es la cruenta primera guerra mundial este es un tema que se toca muy
superficialmente, motivo por el cual las batallas son escasas y asépticas. La trama
trata sobre el bien y el mal, y deja algunas reflexiones interesantes sobre
ello.
En definitiva, una buena opción palomitera si quieres
pasar un rato agradable.
Recomendada.
Me agradó, no esperaba mucho porque estas pelis de superheroes son un poco tontas y repetitivas pero creo que tiene mas guión y chicha que otras. Me gustó el guiño a las pelis de Superman.
ResponderEliminar;)
A mí me ha gustado la película y sobre todo Gal Gadot. Estamos demasiado acostumbrados a ver superhéroes hombres. Las mujeres también tienen que tener su hueco y poder, y ella creo que lo ha defendido bien. He conocido a Wonderwoman con esta película, así que no sé si está bien representada, pero me gusta. Se la ve fuerte y decidida. Es muy inocente, pero tampoco ha vivido lo que nosotros para saber cómo es la realidad y no serlo.
ResponderEliminarLas películas de Marvel últimamente me parece que son mucho de luchar. A veces, las veo y pienso que se han pegado más de media película luchando, y total, ya sabemos que los que ganan son los buenos antes de empezar. Hace falta más historia, más diálogos. En definitiva, más chicha.
Un beso Raquel :)