10 de enero de 2013



A casi 4300 metros de altitud, tocando el cielo del suroeste del altiplano boliviano, existe una laguna rodeada por una aridez extrema. Se parece a otras lagunas del Altiplano salvo por un detalle, es roja.


En realidad, cada vez que se visita, incluso en un mismo día, el color no es exactamente el mismo sino que recorre toda la gama de tonos que va del naranja al granate.



Situada dentro de la Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Avaroa, en el suroeste del departamento de Potosí, la laguna colorada tiene una superficie de unos 60 km2 y una profundidad media de tan solo 35 cm.



La coloración característica se debe a la presencia del alga Dunaliella salina que, para poder sobrevivir a la intensa radiación ultravioleta a esa altitud, produce una enorme cantidad de beta-caroteno, el mismo pigmento que da el color naranja a las zanahorias. Otra responsable del color es un alga cianofícea rica en pigmentos de ficoeritrina, una proteína roja.



Los cambios de  temperatura y de radiación solar durante el día causan la floración de estas algas, dando lugar a las variaciones en la coloración.

En el verano austral, de diciembre a abril, el paisaje es todavía más impresionante, ya que este es un lugar de cría para los flamencos andinos aves migratorias que se cuentan por miles en sus aguas ricas en minerales. El número de flamencos puede superar los 20.000 ejemplares. En invierno, de mayo a agosto, el número cae dramáticamente hasta unos pocos cientos.



De las seis especies de flamencos existentes en el mundo, tres se encuentran en esta laguna. El más abundante es el flamenco de James (Phoenicoparrus jamesi), también conocido como parina chica, el cual representa el 90% de los ejemplares. El 10% restante son de la especie flamenco chileno (Phoenicoparrus chilensis) y flamenco andino (Phoenicoparrus andinus), también conocido como puna grande.



La Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Avaroa es el área protegida más visitada de Bolivia, y uno de sus atractivos más curiosos es esta Laguna Colorada.

3 comentarios:

  1. Prometeo9:38 a. m.

    Me trajo ecos de Riotinto, Huelva, un mundo cromatico diferente, alucinate y bello....un abrazo.

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  2. Es verdad, en nuestras propias fronteras hay paisajes igual de impactantes que éste; tenemos una gran suerte.
    Un abrazo Prometeo :)

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  3. Me gusta el nombre, Laguna Colorada, además el sitio parece de otro planeta, de Marte, esperas ver de un momento a otro un marcianito en vez de un flamenco o una llama despistada.
    Bonito sitio
    :D

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