De vuelta, casi recuperada, y con ganas de seguir escribiendo en este desván secreto que tanto me da, a veces de la forma más sorprendente e inesperada.
Ya echaba de menos subir aquí arriba y mirar entre las cajas polvorientas. Echaba de menos el desván con sus tesoros y antiguallas, y sus mundos ocultos en viejos armarios. Echaba de menos la sensación de abstracción que posee este lugar, como si traspasar sus puertas te enviara a otro tiempo lejano, porque muchas veces me sorprende como se me pasa el tiempo aquí arriba, ojeando libros, escuchando música, o buceando entre álbumes de fotos. Necesitaba subir de nuevo, buscar la llave que lo abre, y que esta oculta bajo unos tablones sueltos, y simplemente estar, sin hacer nada más.
Casualmente esta es la entrada 200… Doscientas subidas a este rincón. Reconozco que todo empezó como un juego, por probar, pero ahora se ha convertido en algo más; en un juego divertido, que me entretiene y me hace pasar un buen rato, y que además me da la oportunidad de cambiar impresiones con otros visitantes. No puedo pedir más.
Ya echaba de menos subir aquí arriba y mirar entre las cajas polvorientas. Echaba de menos el desván con sus tesoros y antiguallas, y sus mundos ocultos en viejos armarios. Echaba de menos la sensación de abstracción que posee este lugar, como si traspasar sus puertas te enviara a otro tiempo lejano, porque muchas veces me sorprende como se me pasa el tiempo aquí arriba, ojeando libros, escuchando música, o buceando entre álbumes de fotos. Necesitaba subir de nuevo, buscar la llave que lo abre, y que esta oculta bajo unos tablones sueltos, y simplemente estar, sin hacer nada más.
Casualmente esta es la entrada 200… Doscientas subidas a este rincón. Reconozco que todo empezó como un juego, por probar, pero ahora se ha convertido en algo más; en un juego divertido, que me entretiene y me hace pasar un buen rato, y que además me da la oportunidad de cambiar impresiones con otros visitantes. No puedo pedir más.
Gracias a todos por seguir estando ahí.
Pues no se si aquí toca felicitarte o darte 200 gracias porque en realidad nosotros hemos disfrutado con cada una de esas entradas y somos beneficiarios de esa decisión que tomaste en su día al reconvertir el desván y compartirlo con nosotros.
ResponderEliminarGracias por tu vuelta, por tus comentarios y por estar siempre ahí.
Un gran abrazo.
Pues felicitarte por esos 200 articulos y espero poder felicitarte en los trescientos y en los cuatrocientos y en los mil pue ssignifica que estamos con el placer de leerte y en eso los afortunados somos nosotros...un fuerte abarzo.
ResponderEliminarMi querida Raquel: Me alegro doblemente. Primero porque escribir supone que tienes otra vez la ilusión y la fuerza para volver a hacerlo y segundo por esas 200 entradas que a mí me han aportado el descubrir de tus manos muchas cosas nuevas.
ResponderEliminarBrindo contigo por muchísimas entradas más y por estar otra vez entre nosotros.
Mil besos y mil rosas.
Me ha encantado compartir los secretos que guarda tu desván, y espero seguir haciéndolo con mucho interés. Me alegra que estés recuperada. Muchos abrazos
ResponderEliminar¿Lo ves? Si es que estos descansos son como perlas que detienen el tiempo en el collar de nácar.
ResponderEliminarTu blog es otra perla, casa preciosa, exquista en su clase, que navega en su concha en la inmensidad de este mar.
Te animo a participar en los relatos encadenados del Aniversario del Evangelio de J. I.
Besotísimos
Felicidades por esos 200, ¡que sean muchos mas!
ResponderEliminarNo te aporto nada nuevo con este comentario, sólo que como ya han dicho por aquí los descansos son buenos, ayudan a ver las cosas desde la distancia y con mas entusiasmo, así que a escribir o a lo que quieras.
Un besote
:D
Enhorabuena, Raquel, por estas doscientas entradas y enhorabuena por desperezarte y comprobar que el bienestar inunda de nuevo tu cuerpo pero sobre todo tu alma.
ResponderEliminarSeguro que desayunaste mirando hacia tu desván de soledad buscada y seguro que, presurosa, fuiste a recuperar esa llave dormida entre tanto tablón suelto.
Las gracias, que son doscientas, siempre a la artista.
Un beso.
Zhivago
Reconozco que este rincón me ha ayudado mucho a centrarme en algo, a escribir, a no dispersarme tanto, pero lo mejor ha sido conocer gente, leer otras opiniones.
ResponderEliminarMuchas gracias, Durrell.
Un abrazo y un beso.
Pues yo espero poder escribir 200 articulos más y que vosotros esteis ahí para leerlos.
Un fuerte abrazo, Prometeo.
El descanso me ha venido bien para recuperar la ilusión por escribir en este rinconcito; yo tambiñen aprendo mucho buscando temas sobre los que escribir aqui.
Gracias, Malena, y muchos besos.
A mi me alegra leer tus comentarios, siempre tan amables.
Gracias, Ligia.
Un gran abrazo.
Sí, gemmayla, los descanson son necesarios para retomar las aficiones con más ánimo. Me ha venido bien.
Gracias por tus palabras, y a ver si escribo algo en el foro del Judas.
Muchos besos.
Claro que si, Ana, con saber que estás ahí es suficiente. Gracias por todo.
Un beso grande.
Gracias Zhivago. Aún me queda un poco para estar al 100% pero poco a poco.
Un beso.